INTRODUCCIÓN
La (UNICEF, 2020), “Recomienda a los padres
y madres encontrar tiempos para ayudarles, y desarrollar habilidades como
la escucha activa, actuar con ternura, tener firmeza, pero con generosidad,
sentido del humor, poner límites sin dejar de establecer responsabilidades de
tareas y actividades”. Se debe brindar tiempo de calidad a los hijos para que
aprendan, respetando sus individualidades.
Según (Lalama Méndez et al., 2021) “Para
que exista una educación de calidad, es necesario poder desarrollar un
aprendizaje por medio de la experiencia significativa, esto influye
considerablemente en el entorno familiar del niño ya que es la familia quien
estimula y cumple con ese rol primordial en la formación de valores y de nuevos
conocimientos.” Los padres deben tener una buena comunicación con sus hijos,
deben estar comprometidos con su educación para junto a ellos obtener
resultados eficientes en el proceso enseñanza aprendizaje.
(Gavilánez Villamarín et al., 2021)
manifiestan que “los padres no optan por la educación en casa, porque es una
gran responsabilidad, ya que para que la educación sea óptima, los padres deben
ser constantes y claros al momento de acompañar el proceso de
enseñanza-aprendizaje, con conocimientos mínimos de orientación pedagógica y
adaptación al entorno”. Es primordial que los educandos sientan el apoyo que se
les brinda en el hogar, además de que el docente al ver una colaboración siente
que existe una preocupación por la educación del niño.
Según (Gordón, 2020) manifiesta que “En el
Ecuador la falta de preparación de los padres de familia en la formación
escolarizada de sus hijos de los niveles iniciales y de educación básica,
quienes demandan mayor tiempo y dedicación por parte del docente y de los
padres de familia, los educandos debido a su edad se distraen con facilidad,
razón por la cual se requiere la presencia de los padres.” En los niños de
inicial y primeros grados si no se encuentran con un adulto es complicado
seguir con la clase de forma fluida evidenciando la impaciencia de la mayoría
de los padres quienes al no estar acostumbrados a acompañar el proceso de
aprendizaje de sus hijos acumulan exceso de estrés, desarrollando altos índices
de violencia y de agresión.
En la presente investigación
“Acompañamiento de los padres en el proceso de enseñanza aprendizaje para la
mejora del rendimiento Académico de los estudiantes del sexto año de Educación
Básica de la Unidad Educativa Digna Beatriz Cerda Neto del periodo 2020-2021
pretende conocer el impacto de la falta de involucramiento de los
representantes en el proceso educativo.
En la institución se ha detectado la falta
de participación en los padres de familia en el proceso enseñanza aprendizaje
debido a sus horarios de trabajo lo cual les impide estar presentes en dicho
proceso, la escasez de acompañamiento de los representantes ha provocado que
los estudiantes se sientan solos, desmotivados durante las clases virtuales la
cual ha dado paso a que el niño desarrolle un cuadro de estrés provocando
despreocupación de sus tareas escolares y extracurriculares incitando el
desinterés por el estudio.
Como lo citan (Zambrano Mendoza &
Vigueras Moreno, 2020) “La familia juega un papel importante en el proceso de
enseñanza - aprendizaje, porque desde el nacimiento se inicia la preparación
del individuo en diferentes aspectos: capacidad de dar afecto, tolerancia,
relación con la sociedad, factor económico, disponibilidad de tiempo, valores,
cultura, religión”. El hogar es la primera escuela donde se forman los niños,
la familia es la encargada de cultivar los valores para ser aplicados en su
diario vivir, en consecuencia, la educación proviene del hogar.
Según (Pavez, 2016) “Los padres aumentan
el conocimiento acerca del desarrollo del niño, aumentan sus habilidades
parentales y la calidad de sus interacciones”. La participación de los padres
de familia daría resultados positivos en el proceso enseñanza-aprendizaje
contribuyendo a un aprendizaje más efectivo, siendo los encargados de
transmitir los valores y principios de la vida, para así favorecer su éxito
académico.
Desde el punto de vista de (Escobar, 2015)
“El proceso de enseñanza-aprendizaje no depende sólo del alumno, o del docente,
es algo que lleva inmediatamente al reconocimiento de la imperante necesidad de
una nueva forma de concebir este proceso, pues el alumno debe ser percibido
desde sus particularidades, es decir cada alumno posee características
específicas, cada uno tiene un ritmo de aprendizaje distinto, por lo que la
misión del docente es partir de esa diversidad para implementar estrategias que
le permitan percibir la capacidad que cada alumno tiene para, de esta manera,
poder desarrollar en el alumno el máximo de su potencial, haciendo uso de los
conocimientos que adquiere en el día a día”. El proceso de enseñanza es la
ocupación más importante del docente ya que debe escoger los contenidos, las
técnicas y estrategias didácticas para enseñar al estudiante, respetando y valorando
sus individualidades
Según (Abreu Alvarado et al., 2018) “El
Proceso Enseñanza aprendizaje tiene como propósito esencial favorecer la
formación integral de la personalidad del estudiante, constituyendo una vía
principal para la obtención de conocimientos, patrones de conducta, valores,
procedimientos y estrategias de aprendizaje”. El aprendizaje es el intercambio
de la acción de profesor y alumno mediante estrategias concretas que permitirán
que los estudiantes alcancen sus objetivos.
Para (Rochina et al., 2020) “El profesor
es el protagonista y el responsable de la enseñanza, es un agente de cambio que
participa desde sus saberes, en el enriquecimiento de los conocimientos y
valores más preciados de la cultura y la sociedad”. El profesor debe brindar un
clima agradable en el aula, ser el guía y agente mediador, entre el estudiante,
padres de familia y sociedad.
Desde el punto de vista de (Quinn, 2014)
“El docente debe ser totalmente consciente del compromiso educativo que tiene
con sus discípulos y, en la medida de lo posible, debe mostrarse con el mayor
grado de neutralidad para conseguir formar a estos niños dentro de los cánones
de la libertad de pensamiento y de crecimiento, así como dotarlos de un amplio
bagaje de conocimientos y puntos de vista, que les posibiliten adquirir esa
actitud crítica tan ansiada y que tanto escasea en nuestra sociedad actual”. El
papel fundamental del docente es formar estudiantes críticos y reflexivos
aplicando un aprendizaje constructivista, trabajando mancomunadamente con los
padres de familia para lograr sus objetivos.
Según (Rochina et al., 2020) “El
estudiante es un participante activo, reflexivo y valorativo de la situación de
aprendizaje, donde asimila la cultura en forma personalizada, consciente,
crítica y creadora en un proceso de crecimiento contradictorio y dinámico en el
que construye y reconstruye con otros sus aprendizajes de la vida, con vistas a
alcanzar su realización plena”. El estudiante es la figura principal del
proceso educativo, puede ampliar su conocimiento y capacidades con la
manipulación de diferentes fuentes como: maestros, libros, material didáctico o
una temática, incorporando todos estos recursos en su proceso enseñanza
aprendizaje, no obstante, requiere la guía de los padres de familia.
Según (Contreras et al., 2015) “En el
estudiante virtual, el trabajo colaborativo es un factor potenciador del
verdadero intercambio de conocimiento, enriquecido con las experiencias del
otro, para fortalecer los aprendizajes individuales y el desarrollo de
habilidades comunicativas, así como para el desarrollo de destrezas que le
permiten ser más recursivo, autónomo y proactivos para la toma de decisiones”.
El estudiante desarrolla sus habilidades, destrezas y capacidades conservando
sus valores, fortaleciendo su autoestima y motivación cuando sus padres están
pendientes de su educación.
Para (Palomino, 2020) el acompañamiento en
el desarrollo de las tareas hace parte de la misión formadora que tienen los
padres de familia como base fundamental de la educación de sus hijos, con el
fin de lograr la construcción y reconstrucción de las metas de desarrollo
humano, integral y diverso.
Según (Zamrodah, 2016) “En el hogar se
comparten experiencias que deben tener como requisito básico la disposición por
parte de los padres para realizarlas, es decir tener una actitud positiva para
dedicar un espacio de tiempo breve para hacer de la actividad algo grato y
agradable. Tan sólo 20 minutos de interacción entre padres e hijos pueden ser
suficientes para que el niño cree un hábito de lectura para toda su vida”.
(Inge S, 2013) manifiesta que los padres y
docentes son los encargados de brindar a los niños/as igualdad de oportunidades
en la educación y en contexto en general, ya que estos son los entes que ayudan
a los niños/as a adquirir un buen aprendizaje.
(Curricula et al., 2021) en su
investigación concluye que “los padres de familia ayudan a sus hijos en las
tareas escolares solamente cuando disponen de tiempo, el cual es limitado y
esto no contribuye a la mejora de su rendimiento académico”.
MATERIAL Y
MÉTODOS
La investigación desarrollada consistió en
trabajar en la institución educativa en mención, con estudiantes del quinto
grado de primaria, se utilizaron técnicas e instrumentos como la encuesta
basada en los indicadores de liken, obteniendo resultados de 84 encuestados, la
estructura del instrumento estuvo compuesto de 16 ítems de opción múltiple el
mismo que se aplicó en línea como mecanismo metodológico óptimo para obtener
información, con el propósito de analizar la participación de los padres de
familia en el proceso enseñanza aprendizaje de sus hijos. El porcentaje
analizado se considera significativo dentro del universo y, en este sentido, la
muestra permite inferir resultados precisos. Para el procesamiento de la
información se utilizaron técnicas de estadística descriptiva que permitieron
interpretar, resumir y presentar la información a través de figuras, se aplicó
el enfoque metodológico Cuali-cuantitativo, enmarcado en la recolección e
interpretación de datos obtenidos en la investigación descriptiva-
bibliográfica.
RESULTADOS Y
DISCUSIÓN
En la siguiente sección se revelarán los
resultados obtenidos en el trabajo de campo estudio, delimitando la situación
real de los estudiantes y la participación de los padres de familia en el
proceso formativo de sus representados.
Figura 1. Encuesta de la edad.
De acuerdo a los resultados obtenidos en
la encuesta de la Edad la figura 1, el 43,90% de padres de los estudiantes
encuestados se encuentran entre las edades 31 a 40 años de madurez, mientras
que el 21,95% corresponde entre las edades entre 20 a 30 años, el 20,73%
corresponde a la edad adulta, por último 13% corresponde a las edades 50 años
en adelantes. Datos que evidencian que el mayor porcentaje de la población
objeto de estudio corresponden a estudiantes con padres en edad madura que
participan en la educación de sus hijos en la modalidad virtual.
Figura 2. Encuesta de horario de trabajo.
De acuerdo a los resultados obtenidos en
la figura 2, el 56,79% de padres de familia pasan fuera de casa 12 horas,
mientras que el 34,57%, 8 horas y el 8,64%, 6 horas. Datos que revelan que el
mayor porcentaje de los padres de familia pasan fuera de casa y no realizan el
acompañamiento del proceso de enseñanza aprendizaje de sus hijos en la
modalidad virtual.
Figura 3. Encuesta de los representantes de los estudiantes.
En la figura 3, el 85,71% de los
encuestados mencionó que la persona que participa en la realización de
actividades en casa es la mamá, mientras que el 4,76% contratan ayudante, el
3,57% está repartido entre el papá, el 2,38% hermanos y tan solo el 1,19%
mencionó que son tíos, vecinos y otras personas entre abuelos y primos quienes
ayudan. Datos que revelan que el mayor porcentaje son solo las madres las que
participan en el proceso enseñanza aprendizaje de sus hijos.
Figura 4. Encuesta de la supervisión de los padres a las
actividades
De acuerdo a los resultados obtenidos en
la encuesta de la figura 4, el 42,86% de los estudiantes indican que sus padres
le dedican diez minutos a la supervisión de sus actividades, el 21,43% treinta
minutos, el 20% una hora, 11% dos horas, el 2,38% cincuenta minutos, y el 2% no
se dedica. Datos que revelan que el mayor porcentaje de la población objeto de
estudio, sus padres dedican poco tiempo en la guía de actividades durante las
clases virtuales, provocando estrés e inseguridad en sus hijos.
Figura 5. Encuesta de las causas del no poder asistir a
participación escolar de sus representados.
En la figura 5, el 47,62 de la población
encuestada manifiesta que sus padres trabajan mucho, mientras que el 20,24%
piensan que sus hijos no necesitan su ayuda, el 13,10% no se preocupan, el
11,90% no tienen conocimientos necesarios y el 7,14% otras personas los apoyan.
Manifestando que el mayor porcentaje de padres de familia dedican más tiempo a
su trabajo y no pueden involucrarse en las actividades escolares de sus
representados.
Figura 6. Encuesta de guía de los padres en actividades académicas.
De acuerdo con la figura 6, el 46,43% de
los encuestados mencionó que a veces los padres guían sus actividades,
mientras que el 16,67% señala que nunca, el 14,29% frecuentemente, el 11,90%,
muy frecuentemente, y el otro 10,71% siempre. Datos que revelan que la mayoría
de la población objeto de estudio a veces tiene la guía de sus padres en las
actividades escolares durante la modalidad virtual, caso que perjudica en el
rendimiento académico de los estudiantes y la participación de los padres de familia
en el proceso formativo de sus representados.
CONCLUSIONES
Los padres de familia no participan
activamente en el proceso educativo lo cual afecta el rendimiento académico de
los estudiantes, abandonan toda la responsabilidad a la madre, respecto al
proceso de enseñanza – aprendizaje.
En conclusión, se puede expresar que los
padres de familia deben brindar acompañamiento en las actividades escolares de
sus hijos, presente interés en su preparación académica, de esta manera el
estudiante se sentiría motivado al ver que sus padres son partícipes de su
educación.
Hoy en día se ha abandonado la educación
porque los padres enfocan todos sus esfuerzos en trabajar para que la familia
tenga una mejor calidad de vida, pero se olvidan de tomar el tiempo necesario
para realizar las actividades escolares, se deja de lado el proceso educativo y
se responsabiliza a la institución educativa responsable de la educación.
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